A días de haber vivido una de las finales más controvertidas de los torneos nacionales de fútbol profesional es a lo menos raro el silencio cómplice que han guardado las autoridades – en especial la intendenta de la Región Metropolitana, Cecilia Pérez – y los medios de comunicación sobre el fracaso del plan de seguridad pública “Estadio Seguro” en el partido jugado el lunes pasado entre la Universidad de Chile y O’Higgins de Rancagua.
Comenzando el partido de la gran final del torneo nacional de apertura, cuando salieron los equipos a la cancha, desde varios puntos del Estadio Nacional aparecieron estruendosos fuegos artificiales, bombas de ruido, luminosas bengalas desde las trincheras de ambos equipos, sin, al parecer, llamar la atención de las autoridades que semanas antes no dejaban ingresar al estadio los instrumentos de la inocente e inofensiva Bandita de Magallanes. Sin embargo como rememorando el viejo adagio de “último día nadie se enoja”, los hinchas de ambos equipos hicieron gala de pirotecnia, bombos y enormes banderas a vista y paciencia de las autoridades y los medios de prensa nacionales, que hacía pocos días defendían el “Plan Estadio Seguro”.
Prefiero no pensar en criterios discriminadores, pero los mismos hechos fueron cuestionados en partidos de “menor importancia”, en los jugados por equipos de provincia o derechamente, en los que participaba Colo-Colo.
Tampoco quiero entender que la ilustre hincha de la “U”, Cecilia Pérez dio carta blanca a su equipo para el partido final o ganarse un par de simpatías para abonarlas a su campaña de futura diputada.
En fin, la cabeza sigue atando cabos hasta llegar a otra hipótesis: ¿no será que todo el show mediático contra la Garra Blanca sólo fue una persecución para proteger a Blanco y Negro y así esconder el fracaso que aún se vive dentro del club albo?
Son muchos los cuestionamientos que quedan luego del partido de ayer, más aún si ni la voz del propio encargado de Estadio seguro, Cristian Barra, se ha dejado escuchar. Afortunadamente no hubo grandes desmanes después del encuentro; sin embargo, no hay que esperar que ocurran desgracias para hacer cumplir la ley que ellos mismos impulsaron y recordarles que la ley pareja no es dura.
¿No será que todo el show mediático contra la Garra Blanca sólo fue una persecución para proteger a Blanco y Negro y así esconder el fracaso que aún se vive dentro del club albo?
Porque, sea como sea, en el partido del lunes se dejó ver un real fracaso y “by passeo” del plan Estadio Seguro.
——-
Foto: ferplei.com
Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras Reglas de Comunidad
CHRISTIAN
por favor que daño asían los bombos en los estadios ? ni un daño solo llevaba al estadio y a los hinchas de la u mas coordinados para alentar a universidad de chile 😉
ley realmente estúpida !
bandantofa
con carnet en mano y un par de horas antes y con los bombos desarmados y se arman dentro del estadio con los paco al lado y era.
sebastian lorca
Estadio Segxro es xn fracaso…!!! y eso es x la gente k lo dirige,0 organizacion,0 organizacion,0 de todo…!!! esto es xn chiste….k vxelvan los bombos y las banderas al estadio…ya k no hay espectacxlo en las canchas k el espectacxlo se de en las galerias…!!! agxante la GB…!!!!!!!!!!!
yo no soy xn mafioso,yo no soy dirigente;yo soy hincha del albo como toda la gente…!!!