Finalmente, están ya los resultados de las elecciones parlamentarias y presidenciales. Como era de esperar, la ultra derecha y la izquierda están en segunda vuelta presidencial. En el Congreso y Senado, por otra parte, las fuerzas conservadoras tienen más escaños que sus adversarios progresistas e independientes. En esto tampoco hay mucha novedad, porque se veía venir por la decadencia del gobierno, las encuestas y el clima electoral previo y mediático.
Lo que sí es más interesante es lo sucedido con la candidata de ChileVamos y con el PDG más Franco Parisi. Con ChileVamos, digamos que la candidata sufrió una debacle importantísima electoral, que, en parte, representa el fin de personas que fueron parte de la transición de fines de los 80 y comienzos de los 90 hacia la democracia. Se está acabando el período de los partidos más tradicionales e históricos que han ostentado el poder desde la Concertación hasta los gobiernos de Sebastián Piñera. Y se abren paso los republicanos, los libertarios y el PDG.
Ahora bien, como decíamos, la “sorpresa” es la votación que obtuvo Franco Parisi. Donde la pregunta que se podría hacer es ¿de dónde salió ese, casi, 20% de votos? Que lo posiciona en tercer lugar. Van a comenzar a surgir diversas hipótesis. Aquí planteamos tres, que tampoco es un fenómeno asilado en Chile; gente que viene por fuera de la “clase política”, que no tiene una línea ideológica marcada y medidas populistas fáciles.
Vamos, entonces, por el primer argumento. La votación de él puede ceñirse a personas que están desencantadas con la política en general, tanto con la izquierda como con la derecha. Todos son corruptos, todos son iguales, todos quieren el poder, todos van por el dinero, todos son abusadores.
El segundo argumento, puedo ser de voto castigo a la derecha y gente “picada” con la misma, una impugnación a los valores tradicionales perdidos por la derecha, que, para algunos sectores, se han “izquierdizado”.
Se está acabando el período de los partidos más tradicionales e históricos que han ostentado el poder desde la Concertación hasta los gobiernos de Sebastián Piñera. Y se abren paso los republicanos, los libertarios y el PDG
El tercer argumento, personas que se sienten identificadas con Parisi, en tanto aspiracionales, arribistas, que ven a sus pares “por encima”, calculadoras, frías y el “éxito” que él tiene es material y económico. Personas así hay muchas en Chile, que piensan que merecen más reconocimiento social y tener un espacio en posiciones dentro de la élite. Dicho en jerga chilena “el tipo es choro, bacán y se cree el cuento” de “selfmade”, un sueño del siglo XX de Estados Unidos que es imposible de conseguir en Chile, salvo casos excepcionales, por contactos, por pitutos, etc.
Lo cierto es que, sean cuales sean las razones, Parisi, como decimos, es tipo que no tiene convicciones políticas, es una persona pragmática y calculadora. Entonces, simplemente va a esperar a lo que los equipos de Jara y Kast le puedan ofrecer de cara a segunda vuelta y cómo él y el PDG pueden verse beneficiados. Apelando a su slogan “ni fachos ni comunachos”, estará ahí donde vea una oportunidad económica y de proyección a largo plazo.
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¿La ultra derecha y la izquierda?
¿Por qué no la derecha y la ultra izquierda?
¿Es por hacerle un cariñito a la izquierda y hacerla sentir más humana, como mas cercana, y apacible si cabe, lejos de esa izquierda encapuchada que salió a incendiar Chile con actos de terrorismo?
¿Qué se debe entender por la izquierda, la ultra izquierda, la extrema izquierda y la izquierda terrorista? ¿Son todas ellas la misma izquierda? … Todas consentían en nueva Constitución, reformas a Carabineros y liberación de ciertos delincuentes, tal como la señora Jarita, luego, de cierta forma se podría decir que todas las izquierdas son la misma cosa, y como lo propio de ella es el terrorismo,
¿Qué te parece, Juan, si simplemente al referirnos a la izquierda terrorista, le llamamos derechamente izquierda terrorista y además desfalcadora, ya que cuando llega al poder fundaciona el Presupuesto Nacional entre proculturizaciones y bonos a los 500 mil soldados que tiene como sanguijuelas en el Estado a quienes con algo de cariño se les llama parásitos?